Para esta propuesta, la enfermedad resulta de fuerzas o
espíritus; representa un castigo divino, o bien se trata de un estado de
purificación que pone a prueba la fe religiosa. Las fuerzas desconocidas y los
espíritus (benignos y malignos) constituyen las variables determinantes y
condicionantes del estado de salud-enfermedad que priva en un individuo o en
una sociedad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario